Tyrannosaur [2011]

Paddy Considine | Gran Bretaña | 92 min | 2011

Una puñalada. Una piña. Una patada. Un palazo. Otra piña. Un mordiscón. Una orquesta de violencia física: ese es el pulso, así suena el debut del actor Paddy Considine. Seco, como el eco de un mazazo a la cabeza. Para marcar las coordenadas, esta es una película que bebe directo de la fuente del realismo social inglés (Alan Clarke, Mike Leigh, Ken Loach) pero con una rosca más de miserabilidad. Se denuncia que el mundo está podrido y a cada punto de giro -siempre más cruel que el anterior- se lo vuelve a repetir.

En esta zona periférica, residencial, nadie es bueno y todos lo saben. Jesús anda por ahí, oliendo las derrotas. El infierno entibia desde abajo, aguardando las miserias. La primera acción de nuestro protagonista es una patada en la panza a un perro. Desde ahí partimos. Gente miserable que no apuesta ni un peso por sigo misma. O es el sonido de unos hielos en un vaso de whiskey o es el disparo de un arma a medianoche. No hay punto medio. Cuando no se está sufriendo, se está errando. La distancia entre el bien y el mal están definidas y esa moral en primer plano es lo que convierte a Considine en una suerte de hijo postizo de Abel Ferrara. Uno que en su aliento a bourbon inglés exhala la palabra redención.

LINK