Para quienes conocen a Aubrey Plaza en su vida artística suele ser costumbre su lengua venenosa así como también la actitud mindfreak con la que enfrenta la vida. En este caso adopta el papel de una joven que tiene una gran dificultad para hacerse de amigxs y esto la lleva a comportamientos obsesivos sobre las redes sociales.
El principal conflicto de la trama recae en el momento en que Ingrid, el personaje de Aubrey Plaza, llega a una cuenta de Instagram de una fotografa, encarnada por Elizabeth Olsen, a la que empieza a atosigar hasta conseguir dar con ella.
Ingrid es capaz de todo respecto a la imagen y a la creación de falsas personalidades para poder llegar a la vida de quien le interese a partir de la plasticidad que ofrecen las redes sociales.
Esta es una película que se desenvuelve bajo un alto grado de humor negro, rozando el drama por momentos pero que resulta necesaria para poner en cuestión algunas actitudes que suelen verse en las redes sociales y el daño que causan los clicks efímeros en las mentes de toda una generación que ve a la salud mental como algo primordial y que se suele descuidar.
Comments